Emergencia hídrica por cuarto año consecutivo

La temporada de riego 2013/2014 será pobre en los ríos Mendoza, Tunuyán y Atuel, y seca en el Río Diamante y Malargüe. El director de Gestión Hídrica destacó en Radio Jornada la necesidad de que la población se concientice sobre esta problemática.

Por cuarto año consecutivo, las escasas nevadas durante el invierno decretaron que continuará la emergencia hídrica en todo el territorio provincial. Las autoridades de la Dirección General de Escuelas informaron hoy sobre el estado de los principales cauces de Mendoza y solicitaron al gobernador el decreto del estado de emergencia.

Según indicó Juan Andrés Pina, director de gestión hídrica del DGI, en diálogo con Radio Jornada, “la temporada de riego 2013/2014 será pobre en los ríos Mendoza, Tunuyán y Atuel, y seca en el Río Diamante y Malargüe. Todos están por debajo de las medidas históricas”.

El ingeniero participó, junto al Superintendente José Luis Álvarez y técnicos de la institución, de un acto donde se informó sobre el resultado del pronóstico hidronivometeorológico, que determinó que el volumen estimado de agua que traerán los ríos en Mendoza será alarmante.

“La realidad es que tuvimos años de excedencia y hoy ya no es como antes, la tendencia es la baja de los caudales. La población ha aumentado, así como la demanda. Debido a ello hemos propuesto una serie de medidas tendientes a cuidar el agua, concientizar a la población y eficientizar el servicio”, expuso Pina.

En ese sentido, subrayó la preocupante contaminación que genera la población: “Es una falta de respeto y de cultura del agua. Si bien la cantidad de basura en los cauces ha disminuido luego de las campañas de concientización que hemos llevado a cabo, aún queda mucho por mejorar”.

“El agua que nosotros ensuciamos es agua que perdemos para regar la producción de Mendoza. Los residuos sólidos urbanos en nuestra infraestructura hace que seamos menos eficientes, con taponamientos en los canales, pérdidas, que el productor no reciba lo que necesita, etc.”, agregó.

La DGI impulsa ocho medidas para recordar a la población que Mendoza es un desierto y que el comportamiento respecto al agua debe ser acorde a esa situación.

Debido a ello, José Luis Álvarez alertó acerca de la cantidad de jardines verdes no condice con la realidad. “Estamos malgastando el agua. Vivimos una crisis que hace que nos tengamos que replantear algunos usos y destinos del agua”, manifestó el funcionario.

http://www.jornadaonline.com/Mendoza/104095

Deja un comentario